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Continuamos con el Ssangyong Rexton W, un todoterreno que hemos probado con el motor diesel de dos litros con 155 CV, un 4×4 de verdad con reductora que ha demostrado unas buenas aptitudes fuera del asfalto. Todo sobre el motor, aptitudes off-road, comportamiento y consumo lo hemos visto en la primera parte de la prueba.
En la segunda nos toca analizar el diseño exterior, un modelo que se ha renovado en su tercera generación con cambios más que evidentes con respecto al Rexton II. Analizaremos el diseño exterior, pero también el interior que ofrece espacio hasta siete ocupantes y un buen maletero.
Diseño exterior
Exteriormente la tercera generación cambia radicalmente su frontal, con nueva parrilla y faros con tecnología LED. Lo curioso es que los LED se usan para las luces de posición, mientras que las de día son de bombilla.
Lateralmente destaca por las llantas de aleación de 18 pulgadas (de 16 pulgadas en el caso de la versión 4×2 y de 18 pulgadas en las versiones 4×4) y también aparecen los retrovisores con los intermitentes integrados. Las estriberas laterales son un buen complemento porque el Rexton es un coche alto y así nos evitamos saltar para acceder al interior.
En la zaga destacan los faros con tecnología LED. Y según la versión puede disponer de la apertura independiente del cristal trasero. Exteriormente el Rexton W es un coche robusto e imponente que crece en todas sus medidas con respecto a la anterior generación.
Diseño interior, espacio y acabados
Por dentro el salto en cuanto a calidad es significativo, el nuevo Rexton W recurre a materiales acolchados y agradables al tacto, eso sí, el diseño general del salpicadero sufre pocos cambios. Ahora en la versión tope de gama está disponible un acabado en madera que también sirve para elevar la sensación de calidad en el interior del Rexton.
La postura de conducción es alta, con una buena visibilidad tanto delantera como lateral y trasera. Los asientos son cómodos, con regulación en altura (de dos puntos), con apoyo lumbar y además el volante es regulable en altura y en profundidad.
Las plazas traseras son amplias, con espacio más que suficiente para pies y para la cabeza, eso si, la plaza central es más dura. Destaca por las siete plazas, aunque el acceso es complicado, porque además de la altura del coche hay que sumarle pasar a las plazas traseras.
Las plazas de la tercera fila son amplias en cuanto a espacio a lo ancho, pero van situadas en una posición muy baja y por lo tanto apenas queda espacio para las piernas. Eso sí, para momentos puntuales o niños son correctas.
Maletero y huecos
El maletero cambia según sea la versión de cinco o siete plazas, porque son los propios respaldos de las siete plazas los que forman el suelo del maletero, entonces para dejarlo completamente plano, desde la marca han creado una especie de hueco que eleva el maletero. En ese hueco se pueden guardar objetos pequeños, pero la parte negativa viene en al altura a la hora de cargar un objeto voluminoso o pesado.
Esto es un punto a tener en cuenta a la hora de decantarnos por las cinco o siete plazas, aún así el maletero es amplio con las cinco plazas, en total son 680 litros de maletero disponible.
En el apartado de huecos, las puertas tienen guanteras grandes y un espacio específico para llevar una botella de agua de medio litro. Además el cofre central también es amplio, mientras que la guantera principal es más bien pequeña (apenas entra la documentación y poco más). Hay dos posavasos en el tren central, pero falta algún hueco donde poder dejar un móvil por ejemplo (en el posavasos si es un smartphone no entra porque es estrecho el posavasos).
En la tercera parte de la prueba analizaremos el equipamiento de serie, el de seguridad y los elementos del equipamiento de nuestra unidad de pruebas. Además pondremos el punto y final a la prueba con la valoración general sobre el coche y los precios del Ssangyong Rexton W.
Fotos | R. Rodriguez y Equipo de pruebas
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